
EL SECTOR LEGAL ANTE LAS CÁMARAS
En los últimos meses, hasta tres profesionales, dos de ellos abogados, me han hecho una consulta sobre si les convenía o no aceptar la propuesta que les hacía un programa de televisión para participar en el mismo. Desconozco si a este medio le ha interesado o no desde siempre la opinión de nuestro gremio, lo que sí parece es que cada vez interesamos más. Pero a lo que voy, explicaros cual fue mi respuesta. A los tres les contesté lo mismo: 1) ¿Te sientes preparado para ir? y 2) ¿Qué objetivos crees que puedes conseguir a través de tu intervención en el programa?
Las preguntas no son baladíes. En mi experiencia considero que hay varios temas que hay que tener en cuenta a la hora de aceptar una propuesta de este tipo. El primero, si realmente se tienen las cualidades necesarias para hablar ante una cámara. No todo el mundo las tiene. Y no se trata como pensarán algunos, de ser más o menos agraciado físicamente, sino de tener un discurso bien articulado, de ser capaz de mirar a la cámara frente a frente, de tener un alto nivel de autocontrol. Todo ello viene por lo general dado cuando hablamos sobre un tema del que sabemos y que sentimos nuestro. Además de dominar la materia, antes de acudir al estudio es necesario elegir con cuidado la vestimenta que mejor puede sentarnos. Es cierto que las cámaras engordan y también lo es, que no todos los colores son adecuados para aparecer ante ellas. Además, antes de grabar nos maquillarán, por lo que no es necesario por tanto que lo hagamos nosotros. Todas estas son reflexiones que debemos realizar antes de acudir al estudio. Hay que prepararse, no vale improvisar.
Si desea más información, puede continuar leyendo el artículo en Diario Jurídico.